Sexta Pena: Bruja.
Cuando era niña nunca me daba miedo los cuentos que se relacionaban con las brujas, me causaban fascinación saber su existencia, adoraba cuando mi abuelita nos contaba a mis primos y a mi, las historias de como en el cielo se aparecían luces rojas con blanco, esa era la señal de las brujas. A mi prima Marta le daban un miedo tremendo, había noches que no dormía con el temor de que una bruja apareciera cerca de su cama, yo sonreía y le decía que se calmara que yo la cuidaría de ellas. Conforme fuimos creciendo le fuimos perdiendo el miedo, Marta y yo seguíamos estando juntas, eso no cambio.
-Dicen que en ese árbol como a las tres de la mañana se aparece una bruja
-Sigues traumada con eso Marta
-Algo que tal si un día cuando saliéramos del baile de la escuela nos la encontramos
-No lo se, a lo mejor me llevaría bien con ella
-¿Que cosas dices manita?
-Si supieras manita, si supieras
No recuerdo bien, como y cuando me convertí en bruja, un día me volví como ellas, solitaria, había puesto una barrera entre la gente y yo, muy pocas veces tenia nuevas amistades, a veces extraño la preparatoria junto a Marta, tenerla como compañera me hacia mas fácil las cosas, ella se encargaba de socializar. Cuando entre a la universidad me toco jugar ese papel , me costo algo de trabajo, pero me fui adaptando, llevo un par de meses convertida en bruja, entre pociones mágicas y hechizos de amor, pero no soy la única bruja en esta ciudad ni siquiera en mi facultad, hay brujas de todo tipo; las que viven para hacer el mal, las que curan, hay algunas que solo se dedican a bailar entre tumbas y mirar acostadas en una ellas como la noche agoniza.Yo creo ser una de ellas, de las que baila hasta que el día inicia.
-¿Quien sera el?
-Se llama Marcos
-¿Como sabes eso Lucia?
-Por que soy una bruja
-Y como buena bruja lo ves todo en tu bola de cristal
-Pues tanto como bola de cristal no, pero lo se
-Tu y tus locuras de ser bruja, un día me lo creeré
-Deberías --Le arranca un cabello a su amiga
-¿Por que lo hiciste?
-Yo me entiendo
Poción para que el se fije en ella:
Ingredientes:
2 ancas de Rana vieja
1 diente de Ajo
200 ml. de Baba de Caracol
1 cabello de la Interesada
Procedimientos:
Poner en una cazuela con agua hirviendo cada uno de los ingredientes por el orden de aparición en los ingredientes, antes de llegar al cabello de la interesada decir el conjuro que viene en el libro de las brujas en tiempos de amor. Si haces bien cada uno de estos pasos, antes de que el gallo cante, el hechizo se realizara.
Al otro día, se entero que su amiga había salido con Marcos y por eso no entraría a clases, ella decidió también en no entrar, no tenia caso, si la única que la mantenía despierta era su amiga y no iba entrar para que entraba ella, resignada iba bajando cuando se topo de frente con Diego, no lo conocía solo sabia que el era un mago, las brujas tenían cierto problemas con ellos, nunca llegaban acuerdos en las reuniones, lo había visto en una de ellas, era guapo, pero ella no tenia ojos ni tiempo para nadie, no le interesaba esos rollos, podía vivir en paz con ese tema, tenia a su gato negro y eso le bastaba.
-Funciono tu hechizo
-¿De que me hablas?
-Del que hiciste para tu amiga
-¿Como sabes eso?
-Las estrellas me lo dijeron
-Son unas chismosas
-¿A poco no son hermosas?
-A veces
-Me gustaría salir contigo
-No suelo salir con gente que no conozco
-Mentira, tu me conoces
-No te conozco
-¡Mentira! Estábamos en la misma reunión de brujas y magos, te mire, me regresaste la mirada, luego te mire fijamente cuando saliste del salón, nos mantuvimos un rato mirándonos y luego te fuiste, sentí una atracción a ti y yo creo que tu también sentiste lo mismo que yo
-No se a que te refieres
-Me llamo Diego
-Soy Lucia
-¿Entonces?
-Yo no se si pueda hacer esto, odio todas esas poses
-Puedes intentar ser tu misma
-Odio ser yo misma y odio cuando la gente dice que sea uno misma ¿Que es ser uno mismo? Yo soy yo misma y yo misma necesito irme a descansar... lo siento
-Odio, odio, odio ¿Para cuando un poquito de amor? ¿Por que estas sola?
-Mis papás no son de aquí, son de un pueblo cerca del mar y yo me he venido a vivir aquí por que estudio en esta ciudad y ademas...
-No, lo que me quiero preguntar es ¿Por que no tienes novio?
-Yo no se --hizo una pausa-- es que el tipo del tipo que se enamora de mi, es el típico tipo que a mi no me gusta y el tipo de tipo que me gusta, es el típico tipo que nunca se enamoraría de mi. Yo cuando salgo con alguien enumero las razones por las cuales me va abandonar, prefiero el fracaso prematuro, decepcionarme de antemano, ahorro tiempo y reproches
Ambos bajaron las escaleras y caminaron sin dirección alguna.
-A ver, tengamos nuestra primera cita, hazme que me decepcione a lo grande y no seas tímida
-¿Quieres que te de motivos para no enamorarse de mi?
-¿Por que no?
-No soy perfecta
-Eso ya me inspira confianza
-Tengo cierto sentido trágico de la existencia, ya que siempre me hace pensar lo peor de todo en cada situación
-Si tu tuvieras que ponerte una calificación entre un 2 a un 10 ¿Que te pondrías?
-un 6
-Tu nunca pensaste que los motivos para espantar a los hombres también podría ser las razones para enamorase de ti, todas las ideas son reversibles, piénsalas al revés dale la vuelta, un 6 transformarlo en un 9¿Estas bien?
-Lo que pasa es que, nunca me había sentido así
-¿Como?
-¡Embrujada!
Ambos se quedaron mirando fijamente, como aquella vez a fuera del salón de reunión, ambos sonrieron, las palabras, aquellas palabras salían sobrando.
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