Octava Pena: Recuérdame que no me quieres.

Era una mañana fría de noviembre, fría para un pequeño parque de esta enorme ciudad, se encontraba atrás de un monumento; una banca y sobre ella una libreta, abandonada por la prisa, por el olvido, por las circunstancias, espera pacientemente, esperaba a su dueño, que regresaría desesperadamente buscándola o, a cualquier curioso que se sentara al lado de ella y se decidiera hojearla. Fue una pareja de novios que la tomo, ella la miro con tristeza, la abrió y se encontró con una serie de cartas.

-¿Qué tiene dentro?
-Cartas, muchas cartas
-¿Cartas? ¿Para quien?
-Para un Andrés y, en ellas le pide con un fervor solo una cosa
-¿Qué cosa le pide?
-Que le recuerde que no la quiere
-¿En serio?
-Si, en todas ¿Quieres que te lea alguna?
-Por supuesto

Ella se dispuso a leerle.

22 de Octubre de 1998

Me gustaría compartir muchos momentos maravillosos, tal vez que podamos compartir, pero al final nunca sucederá, que triste, ya no es raro que esto me suceda de nuevo a mi. No me causa tanta tristeza, pero si una gran gama de expectativas. Muchos me dicen que tú no te mereces a alguien como yo ¿Qué pasa si tú te ajustas a lo que quiero en este momento? ¿Qué pasa si nadie me quiere? De lo que te pierdes, no prometo una vida de ensueño, pero si diferente, tengo muchas cosas planeada para los dos(Ahorita mismo le acabo de decir a Gabriel que no me gusta hacer planes con respecto a la pareja y mira lo que acabo de escribir) Planeo un viaje a mi pueblo el día de muertos, el desfile navideño de una marca de refresco. Suena bonito ¿No? También planeo cantarte un par de canciones, imagínatelo, tú y yo, tu recostado en mis piernas y yo acariciándote el cabello, mientras te canto, quizás te quedes dormido y yo pueda admirar tu cara. Me acorde de una canción "Quiero besarte, tengo miedo despertarte, entro en tus sueños y te grito desde lejos que te quiero" a lo mejor te cantaría esa canción. Suelto un suspiro y se que no te gusta que suspire, pero solo la idea de tenerte así me causa una gran alegría. Cuando inicie a escribir sentí una impaciencia y ahora me siento relajada. Quiero ser realista, pero ya enamorada no se puede ser racional. Es por eso que debes recordarme que no me quieres ¿Lo harás?  Te lo pido, dímelo cada vez que nos veamos. Imagínate la escena, nos vemos, te saludo, nos abrazamos, platicamos de lo que sea, llega la hora de despedirnos, en lugar de que me mires con ese brillo en tus ojos, se volvieran opacos, me miraras fijamente y dijeras "cuídate mucho, por cierto recuerda que no te quiero" y te fueras. Sentiría frío, pero lo prefiero mil veces a sentir el calor de tu ausencia. Haré una plana "No me quiere", por último, te pido que no me confundas, no alteres mi forma de pensar, no me hagas creer que pueda pasar algo entre nosotros. También ¿Lo harás?

29 de Octubre de 1998

Esta sonando "Stand by me" de Oasis y no sé por que me recuerda a ti (¡Mentira, Lo sé!) Ayer mientras desayunábamos cerca de La puerta del Sol, Frente a frente, me hubiese gustado tener presente que somos amigos. Adoro la forma en la que hablas, tu manera de moverte, el movimiento de tus cejas. Cuando hablabas del historial de tus fracasos amorosos, tenía tantas ganas de de decirte ¿Porqué no lo intentamos? Puede funcionar, nos conocemos bien, procurare quererte mucho,  no seré  hostigosa, si no quieres que en el trabajo nos vean, acepto verte a escondidas, esta bien, por favor al rato que te vea, recuérdame que no me quieres "¡No te quiero!"

15 de Abril de 1999

Hace unos meses comíamos en España y hoy estamos en México, de vuelta a casa,  desde entonces no te veo, me refiero a estar frente a frente, yo te he visto, de lejos siempre estás con ella, te ves feliz y me causa envidia, yo también estoy saliendo con un chico increíble; tu hermano, pero no puedo dejar de pensar en ti, intento aferrarme a la idea de que no me quieres, yo se que tu también finges que no me ves, los dos sabemos que lo que escribimos es para nosotros ¿Porqué no tienes el valor de decírmelo? El sábado cuando vaya a comer a casa de tus padres, cuando te acerques a despedirte me recordaras que no me quieres, que a al hora de acercarte y me des el beso en la mejilla me susurres "No te quiero"

23 de Agosto de 1999

Te acercaste a mi, me sonreíste y acariciaste mi mejilla, me miraste, dijiste que te ibas a casar, que querías que fuera madrina junto con tu hermano, sonreí y te di un abrazo, el abrazo fue prolongado, suspire y me dijiste que no te gustaba que suspirara, sonreí y seguí escuchándote, aunque no lo estaba haciendo me quede pensando en lo que sentía, después de todo el que recordó que no me quiere fuiste tú, te mire y no puede evitar sonreír frente a tu recuerdo, que ni siquiera es recuerdo, es más una idea que tengo de ti. Es imposible no enamorarme de ti, cuando en realidad no eres tú, sino la idea que tengo de cómo debe ser enamorarse. Esta vez me lo tengo que recordar a mi misma ¡No me quieres!

16 de Septiembre de 1999

No quiero ver amanecer si en su lugar de tu hermano estuvieras tú, preferiría que la luna se quedara conmigo más tiempo del que se le permite. El es más suave, más comprensiva. A él le gusta escucharme, él no se desespera, no se aleja. Me he visto llorar conmigo y, aunque no sirven como anestésicos, me hacen recordar que no me quieres.Y pienso que tú elección, es simple. Ella o yo. Ella es una gran mujer. Pero Andrés te quiero y, te quiero de tal modo, que finjo que me gusta tu música, dejo que te comas el último trozo de mi galleta, aunque tenga hambre y no me importa que seas tan raro y te rías como estúpido, por todo lo que debería  odiarte, te quiero. Escógeme. Quédate conmigo. Quiéreme.

31 de Diciembre de 2000

Después de la cena salí, tristemente de tu casa, salí al jardín a mirar el amanecer, no tomaste una decisión y yo decidí tomarla por los dos, de pronto llegaste tú, te sentaste a mi lado, a ti te dio por reír, yo compartí la risa, te acaricie la mejilla, no podía, no debía, pero te besé, me abrazaste, sonreí, me puse de pie y me preguntaste que a dónde iría, te respondí que iría con tu hermano, imploraste  que me quedara, que me escapara contigo. Andrés ¿Sabes cuanto tiempo espere a que dijeras esto? ¿No? Desde el día en que te conocí, lo desee noche y día, pero no paso y, hoy me pides que me escape contigo, pero no, por que recordé que no me quieres, por que esperare un hijo de tu hermano y lo más importante. Presta atención. Es un milagro que Antonio exista y que sea quien es. ¿Sabes lo difícil que es que exista alguien como él?  Es  optimista. Sigue creyendo en el amor, en la magia, en la vida. Me está esperando. Y si no vuelvo con él, dejará de ser quien es. Ahora yo te haré recordar que no te quiero, eres  como esas melodías tristes que no dejo de escuchar y por eso envidio a Romeo, porque al menos él si tuvo un final. 

Ella cerró la libreta y la guardo en su bolso, él la miro y la abrazó, ahora la libreta abandonada, tenía un dueño, una chica que sentía empatía con ella. Que difícil habrá sido para la persona que escribió las cartas, recordarse que la persona que tanto se quiere, no te quiera.

-Amor ¿Te imaginas esta historia en la realidad?
-Ya lo creo -hizo una pausa- te diría que existe, pero hace un mes que estamos juntos, aun así sigo esperando a que llueva
-A mí me pasa algo parecido, yo lo hubiera intentado
-¿Que propondrías?

Saco la libreta de su bolso, paso las paginas hasta encontrarse con la ultima hoja que estaba en blanco, tomo un lapicero y escribió.

13 de Diciembre de 2013

Andrés te quiero de tal forma  que no importa si mañana decides irte o encuentras alegría lejos de mí, yo seguiré queriéndote. Esa es la forma bonita de querer, cuando él es lo más importante para ti  y los miedos se mantiene a raya, pues confías en que no te dañará. Yo confío en ti. Te he dicho que te adoro hasta que me pides silencio, te he besado con ternura hasta que me pides descanso, te he mirado enamorado hasta que me pides no verte, te he contado tanto, te he dicho casi todo, pero no sé cómo decirte que tengo miedo. Me siento tonta y no creo que lo entiendas, ni siquiera yo puedo hacerlo. Este día sabe a neblina. Necesito que me abraces. Te lo diré, es obvio; confío en ti porque nunca dejaste de ser mi  amigo. Tengo miedo de ti, de lo atractivo que eres, de ver el brillo de tus labios y arrojarme a ellos, de recibir tu mirada y caer de rodillas, de tu aroma, de tu voz, de que la esperanza pretenda hacer de las suyas otra vez. Es que no debo decirte, pero muero "por tener algo contigo" (como la canción) Este suspiro es porque te extraño, este suspiro es porque no dejo de pensarte, este suspiro es porque se me antojó besarte, este suspiro  es porque odio estar sin ti, este suspiro es porque adoro decir tu nombre, este suspiro es porque ya no puedo respirar bien si no estas a mi lado, hoy cuando nos veamos y te despidas de mi, quiero pedirte solo un favor, recuerda que algún día me querrás ¿Lo harás?


  

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